"Cada prenda tiene esperanza y ambición. Me impulsa el deseo de preservar la sastrería tradicional. Luego están los desafíos a los que me enfrento y elijo luchar como costurera (y como persona) y que me llevan a oponerme al 'fast fashion', al ritmo de la producción industrial actual, a la aburrida conformidad de la ropa, a la explotación del trabajo en producción de bienes masivos, al uso de tejidos sintéticos y la contaminación del agua causada por el teñido de textiles."